Dificultad: Fácil
Tiempo medio de preparación: 35 minutos.
Ingredientes:
– 1/2 lombarda (si es normal, mediana) o 1/4 de lombarda (si la lombarda es grande)
– 1/2 pack de pipas de girasol peladas
– 1 cebolla ( o cebolleta, o puerro)
– 1 manzana (ácida, a poder ser)
– Aceite de girasol
– 1 limón
– 1 diente de ajo (grande)
– Sal
– Especias digestivas: cilantro, cayena, etc
Preparación:
Para que las pipas estén blandas a la hora de batirlas es conveniente dejarlas en remojo desde el día anterior (cubriéndolas con agua, un dedo más del volumen que ocupen en el recipiente donde estén)
Así pues, al día siguiente, se pica bien la lombarda y la cebolla, y se cuecen, tapando la cazuela, poner un poco de sal en una paellera con aceite de girasol y un chorrito de agua (no más de lo que cubra las verduras) y empezar a cocer la lombarda y cebolla picadas, removiendo cada cierto tiempo.
Mientras se cuece la verdura se baten las pipas con el ajo y la manzana pelada y sin el centro, las cubrimos con aceite de girasol (el aceite se echa hasta la altura que ocupen las pipas y la manzana picada).
Pasados 25 minutos se echan las especias (la cantidad va al gusto) en la paellera donde se está cocinando la lombarda, dejándolo todo cociendo unos 15 minutos más.
Se añade el zumo del limón al bol donde se estén batiendo las pipas todo, y se continua batiendo añadiendo el guiso de lombarda poco a poco hasta conseguir una crema homogénea.
Se pasa todo a un recipiente de metal y se deja enfriar. Finalmente se coloca en una fiambrera y al frigorífico (o se echa directamente a las fiambreras).