Éste es un pan rústico que conjuga a las mil maravillas la dulzura de los dátiles con el sabor amargo de las nueces, ambos realzados por el punto de acidez de la harina de centeno. Untado con un poco de mantequilla o de queso fresco, resulta muy nutritivo para el desayuno. Se conserva varios días envuelto en un trapo.
Dificultad: Media
Tiempo medio de preparación: 1 hora de preparación, 2 horas y media de reposo, y 45 minutos de cocción.
Ingredientes para 2 panes:
– 200 gr. de harina de trigo tamizada
– 100 gr. de harina de centeno tamizada
– 25 gr. de levadura fresca de panadero
– 25 cl. de agua tibia (25º C)
– 1 cucharada de mantequilla derretida
– 1 cucharadita de sal
– 2 cucharadas soperas de miel
– 50 gr. de nueces peladas
– 50 gr. de dátiles deshuesados
– 30 gr. de mantequilla para los moldes
Necesitaremos también 2 moldes de cake (rectangulares y hondos)
Elaboración:
Preparación de la masa – Ponemos el agua tibia en una fuente honda y diluimos la levadura de panadero desmenuzada. Añadimos la mantequilla derretida, la sal y la miel. Mezclamos bien todos los ingredientes.
Preparación de los frutos secos – Quitamos el hueso de los dátiles y los picamos en trozos grandes junto con las nueces. Mezclamos los frutos con la harina de trigo. Al ir enharinado, quedarán adheridos a la masa y no se precipitarán al fondo del molde.
Mezcla – Vertemos la harina de centeno en la fuente honda con la mezcla de levadura. Amasamos 5 minutos y añadimos la harina de trigo con las nueces y dátiles.
Amasado – Trabajamos enérgicamente la masa hasta que quede flexible. Formamos una bola, la cubrimos con un paño húmedo y dejamos que repose durante una hora y media en un lugar templado (25º C).
Forma de trabajar la masa – La masa debe doblar su volumen. Sobre la superficie de trabajo enharinada, aplastamos con los puños presionando sobre ella y doblándola sobre sí misma. Dividimos la masa en dos partes.
Elaboración y fermentación – Untamos con aceite y harina dos moldes de cakes y moldeamos la masa en forma de pan, de la misma longitud que los moldes. Colocamos los panes en los moldes. Dejamos que la masa repose nuevamente durante una hora.
Cocción – Precalentamos el horno a 180º C. En la parte inferior del horno, ponemos una fuente con agua caliente. Introducimos los panes en el horno y dejamos cocer unos 45 minutos. Desmoldamos los panes y envolvemos en un paño para dejarlos enfriar sobre una rejilla.
