Con la llegada de la Navidad nos acordarnos de esos alimentos que, aunque pueden ser consumidos durante todo el año, por alguna extraña asociación están unidos a las épocas navideñas. Esto pasa con La Gula del Norte, un producto lanzado por Angulas Aguinaga a comienzos de la década de los noventa, que ha resultado ser todo un éxito que nos ha acercado a nuestra mesa un producto asequible y apetecible para todo el mundo.
La Gula del Norte está elaborada con surimi, que se confecciona a partir de las mejores partes de pescados, siendo el abadejo de Alaska uno de los preferidos por varias razones, como su altísima calidad nutricional, su sostenibilidad medioambiental o la pureza de las aguas en las que vive. El pescado se lava para eliminar la grasa superflua y posteriormente se prensa.
En concreto para producir un kilo de surimi, se necesitan 5 kilos de pescado, que por descontado deben ser de reciente pesca. Por ello, para la elaboración del surimi sólo pueden pasar horas desde su captura hasta su manufacturación. Lo que convierte a la Gula del Norte en la reina de la Gula, es que la materia prima es de alta calidad, pues se emplean las mejores partes de pescados recién capturados.
La palabra «surimi» proviene del japonés y quiere decir «músculo de pescado picado», y aunque nos pueda parecer un producto novedoso en nuestra gastronomía, en aquellas zonas del Oriente asiático lleva siendo empleado desde hace más de 500 años como una forma de conservar el pescado.
Desde el punto de vista nutricional, la Gula del Norte supone una excelente fuente proteínica con un aporte calórico muy bajo, ideal para dietas hipocalóricas o evitar el colesterol.
Actualmente podemos encontrar una gran gama de productos de la Gula de Norte, tanto refrigerados, como congelados. Aparte de la tradicional gula normal, podemos adquirir otras preparadas al ajillo, al ajillo con setas o al ajillo con gambas, siendo esta última una de las que más me gusta.
Para la cocina, la verdad que la Gula es un alimento muy socorrido y fácil de preparar, con el que conseguiremos un resultado apetecible con poco tiempo de preparación. Se puede preparar con aceite de oliva, ajo y guindilla solamente, o bien servir para acompañar otros platos, como podría ser un revuelto o una ensalada de Gulas.
Por ejemplo, podemos cocinar un suculento revuelto de Gulas con verduras en un santiamén. Simplemente lavamos y cortamos las verduras que más nos gusten, como espárragos verdes, calabacines, setas diversas, champiñones o pimientos rojos, etc. Luego las doramos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva, una cebolla picadita y dos dientes de ajo. Cuando veamos que las verduras están doradas, será cuando añadiremos la Gula del Norte y remataremos con un poco de sal y pimienta a nuestro gusto. Para terminar, rehogaremos todo unos minutos y ya estará listo.
En televisión, los anuncios de la Gula del Norte son muy celebrados y su estreno se espera en cuanto nos acercamos a las épocas navideñas, en parte por contar siempre con algún famoso o famosa que las patrocine. Desde Rosa Maria Sará, Antonio Resines, Xabi Alonso y Carles Puyol, Fran Rivera y Manuel Díaz «El Cordobés», Ernesto Alterio, el grupo humorista Tricicle a el mítico Alfredo Landa, han sido numerosos actores o profesionales de algún sector quienes nos han acercado este producto a la pequeña pantalla.
Este año cuentan con un invitado de excepción, el actor Karra Elejalde, conocido mayormente debido al éxito conseguido por la película «Ocho apellidos vascos». Todos los anuncios de la Gula del Norte destilan un punto de humor, pero este año ese aspecto se ha visto exaltado por la simpatía y naturalidad de Karra Elejalde. Según el propio actor, el resultado quedó así de hilarante y campechano, debido al buen ambiente durante el rodaje, en el que abundaron las bromas, y eso parece haberse plasmado en el spot. Aunque hay varios anuncios realizados, que seguramente podremos ver estos próximos días, os muestro un sketch llamado «Collejas», en el que nos hacemos una idea del buen rollo que hay este año en el anuncio de la Gula del Norte.
