Tarta de queso y manzana

Dificultad: Fácil

Tiempo medio de preparación: 15 minutos el preparado y 45 minutos de horno.

Ingredientes:

– 3 manzanas fuji o golden
– 275 gr. de queso philadelphia (una tarrina)
– 3 huevos
– 50 gr. de harina
– 160 gr. de azúcar

Ingredientes: para la base

– 3 ó 4 cucharadas de margarina flora
– Unas cuantas galletas (la cantidad es según lo gorda que queráis la base de la tarta)
– canela

Preparación:

Lo primero que haremos es preparar la tartera, molde o cacharro para la tarta, de paso encender el horno que se baya calentando.

Cubrir todo el fondo de la tartera con papel de hornear, si sobran unas esquinas no pasa nada, empujarlas para bajo(un truco es colocar un plato vació dentro y darle forma al papel.

En un mortero o bol colocar las galletas y con una cuchara triturarlas bien, añadir una cucharadita de canela molida y seguir triturando, por ultimo añadir 3 ó 4 cucharadas de margarina (que no quede muy espesa), que hablemos ablandado un poco en el micro y remover todo muy bien.

Echar la pasta de galletas al fondo del cacharro con el papel de hornear y repartidlo que quede extendido por todos los sitios.

Cortar las manzanas por la mitad y limpiarlas de corazón y pepitas, luego cortarlas en lonchas no demasiado finas (yo siempre las pongo con piel, son mas nutritivas, pero si no queréis las limpiáis de piel, cosa que no aconsejo).

Luego cubrir todo el fondo de la tartera con las laminas de manzana, intentando cambiar la posición de las laminas en cada piso que pongamos (para facilitar que al echar la masa entre bien en todos los sitios).

En un bol o en el vaso de la batidora, si es lo suficientemente grande, mezclar y batir los huevos, el azúcar, la harina y la crema de queso. Ir añadiéndolos en ese orden y batir durante un par de minutos.

Verter la masa en la tartera preparada y darle un golpecito muy flojo, para que se siente todo bien.

La introducimos en el horno precalentado a 175º C durante 45 minutos dependiendo del tamaño del molde.

Pasado el tiempo comprobamos con un palillo si está cocida (introducimos el palillo y si sale seco es que ya esta). Si la superficie está ya muy dorada y aun esta un poco cruda, se tapa con papel de aluminio y se deja un poco más. Al sacar del horno se deja enfriar y la metemos en el frigorífico.

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