Esta receta es sencilla y rápido de elaborar no se tarda ni 10 minutos en hacerse, las patatas sirven muy bien de guarnición y esta sabrosa con la salsa. Un dato curioso de las patatas es que son turberculos significa que crece bajo tierra. En la receta os sugiere que la probéis para saber lo rico que esta.
Dificultad: Fácil
Tiempo medio de preparación: 15 minutos.
Ingredientes:
5 o 6 Patatas
1 bote de 1/2 kilo de tomate natural sin triturar
1 diente de ajo
1 cucharadita de pimentón picante
1 buen chorro de vinagre de Jerez
Aceite de oliva
1/2 cucharadita de harina de maíz
1 ó 2 guindillas – cayenas
Sal
1 pepino
Preparación:
Se prepara la salsa colocando en el vaso de la batidora el diente de ajo pelado, el tomate bien escurrido, la cayena y se tritura.
A continuación esté puré se echa en una sartén con dos cucharadas de aceite y se sofríe, añadiendo al sofrito el pimentón picante y el chorro de vinagre de Jerez y un poco de sal.
Se deja cocer a fuego suave durante diez minutos.
En dos cucharadas de caldo del bote de tomate se disuelve la harina de maíz y se añade a la cocción y se deja cocer unos minutos más hasta que tenga una textura consistente.
Mientras hacemos la salsa se puede pelar y trocear las patatas en trozos medianos, se salan ligeramente y se fríen el abundante aceite de oliva hasta que estén doradas.
Se escurren y se colocan en una fuente añadiendo la salsa bien caliente. Por ultimo cortamos en rodajas el pepino y lo ponemos al lado de las patatas bravas a comer.
