Tal y como comentan en vivaelbuenvino.com, para disfrutar de un buen vino, es importante que éste sea de calidad, pero también es fundamental que tenga una buena conservación y sea servido bajo las mejores condiciones.
Para comprender qué accesorios o artilugios pueden ayudarnos a ello, vamos a hacer un repaso por los elementos esenciales que cualquier amante del buen vino debe tener.
Vinoteca
Una vinoteca, en este caso hablando del electrodoméstico (no del lugar donde se vende vino), es una especie de nevera que sirve para conservar las botellas de vino en perfecto estado, de forma que no se pierdan propiedades organolépticas.
Actualmente en el mercado existen numerosos modelos y sistemas de vinotecas que cubrirán nuestras necesidades a la perfección, de manera que antes de adquirir una, tendremos que comprobar la que mejor se adapte a nuestros requerimientos.
Una buena vinoteca será capaz de recrear las condiciones idóneas en cuanto a temperatura, humedad, aislamiento y luz, de forma que las botellas de vino se conserven correctamente sin degradarse.
Por ejemplo, no debe vibrar y tendrá un funcionamiento silencioso, algo importante para que no existan ruidos y vibraciones cercanas al vino. Igualmente, es aconsejable que disponga de un cristal ahumado reflectante para evitar que la luz y los rayos ultravioleta dañen el vino.
Antes de escoger una vinoteca, es primordial preguntarse el empleo que le vamos a dar, ya que no es lo mismo el uso que tendrá una vinoteca en un restaurante (mucho más movido), al que podríamos tener para una vinoteca en una casa particular (no la utilizaremos tanto).
Teniendo en cuenta este empleo, podremos determinar el tamaño de la vinoteca para descartar las opciones que no se ajusten a la forma necesitada, ya que debe existir una relación entre el uso y las dimensiones de la vinoteca.
Por supuesto, en el tamaño y forma de la vinoteca, también intervendrá el espacio del que dispongamos para colocarla. Como ocurre en la mayoría de hogares, si no tenemos mucho espacio para disponerla, existen vinotecas de tamaños discretos que encajarán a la perfección.
Otros factores que pueden condicionar nuestra elección, obedecen a elementos más estéticos, como los colores, acabados o materiales empleados en la fabricación de la vinoteca.
Para poder escoger la vinoteca adecuada a vuestras necesidades, os aconsejo repasar esta guía en la que recopilan varios modelos de vinotecas que tienen una excelente relación calidad-precio.
Botellero
El botellero es otro sistema para conservar las botellas de vino de forma correcta, ya que muchas veces se nos acumulan botellas en casa y no sabemos dónde ponerlas.
Si conseguimos disponer el botellero en una zona donde no exista una luz fuerte o directa, no se produzcan ruidos o vibraciones frecuentes, y el grado de humedad y temperatura sean estables, podremos conservar las botellas de vino sin problemas.
Existen muchas clases y tamaños de botelleros, por lo que habrá que escoger el modelo para el que dispongamos del sitio y espacio adecuados. Como consejo adicional, siempre es mejor comprar un botellero con más capacidad del estimado, ya que es más frecuente que lo llenemos, a que se nos quede vacío.
Los botelleros de madera son los más utilizados, ya que aportan un toque estético rústico y muy adecuado para conservar las botellas de vino. Pero si no tenemos mucho espacio, es mejor optar incluso por un botellero de pared, ya que podremos aprovechar cualquier pared vacía para colocarlo.
La ventaja de tener un botellero, es que las botellas de vino podrán descansar de forma horizontal, algo muy adecuado para mantener el grado de humedad del corcho en óptimas condiciones.
Así que en vez de tener las botellas en posición vertical, con un botellero conseguirás conservar de forma adecuada tus botellas y el vino que contienen.
Por supuesto, otra ventaja evidente es la seguridad de las propias botellas, ya que estarán a buen recaudo en el botellero y así se evitará cualquier accidente si sueles dejar las botellas de vino desperdigadas por la casa o la cocina.
Copas de vino
Las copas son el mejor recipiente para disfrutar de un buen vino, ya que nos permiten sujetar el cáliz por el tallo sin calentar el vino.
También son perfectas porque su forma con base amplia y una boca más estrecha, es la ideal para una correcta oxigenación, lo que favorece un realce de las cualidades organolépticas del vino.
Esta forma permite que podamos menear la copa para oxigenar el vino sin que se nos derrame, pero a la vez facilita la salida de sus aromas para nuestro disfrute.
La mejor copa de vino es la que está confeccionada en cristal transparente, ya que es un material más refinado y poroso que el vidrio, aparte de que no confiere aromas o sabores anormales al vino.
En cuanto al grosor del cristal, es preferible que sea lo más fino y ligero posible, aunque eso hará que aumente su propensión a romperse, por lo que será más delicado.
Sobre la forma, es preferible que tenga la clásica con fondo curvado y estilo tulipa, ya que es la mejor para realzar los aromas y sabores de la bebida.
Según la clase de vino que queramos servir, existen unos tipos de copas más adecuados que otros.
- La copa burdeos es idónea para los vinos tintos jóvenes o blancos. Posee un cuerpo prolongado y más angosto que otras clases de copas. En la parte central tiene forma abombada, que se va estrechando hasta llegar a la boca superior (aun así muestra una abertura correcta). Suele ser el modelo más versátil para tomar vino.
- La copa borgoña muestra un mayor volumen, siendo más abombada en el centro que en la parte superior de la boca. Es perfecta para disfrutar de vinos más sofisticados. La forma convexa más pronunciada tiene la función de ayudar en una mayor emisión de aromas cuando agitemos la copa, aparte que su forma moderadamente curva incrementa las tonalidades del vino.
- La copa para vinos blancos se diferencia por poseer generalmente un tamaño más pequeño que las de vino tinto, aparte de una forma más estilizada y alargada. Aun así, la boca superior tiene el tamaño adecuado para permitir que podamos apreciar los aromas frescos de esta clase de vinos. Algunos modelos pueden tener un tallo más prolongado en relación al cáliz.
- La copa Chardonnay tienen unas dimensiones menores y una boca superior más amplia, ya que busca una correcta emisión de los aromas afrutados que presentan los vinos blancos. Son perfectos también para los vinos espumosos.
- Los vinos blancos secos es mejor servirlos en una copa con volumen en el cáliz, pero que tenga una boca más estrecha.
- Los vinos dulces o aperitivos requieren de copas concretas relacionadas con la cultura específica de cada vino, como sucede con el Oporto o el Jerez. Estas copas tienen un tamaño menor que las normales, aunque respetan el cáliz ancho y la abertura estrecha con el fin de intensificar la liberación de los aromas intensos de estos vinos.
- Los vinos menos intensos, como el Madeira, casan mejor con copas de vino con una boca más abierta, ya que propagan mejor sus aromas.
Sacacorchos eléctrico
El sacacorchos es una pieza también muy importante en el disfrute de una copa de vino, ya que servirá para quitar el corcho con el que la botella de vino está sellada. Existen muchos sacacorchos que cumplen su función, pero el único que nos garantiza un descorche exitoso y sin problemas, es el sacacorchos eléctrico.
Y es que, aunque nos parezca que no tiene importancia, estos artilugios son mucho más cómodos y no requieren que tengamos una gran pericia a la hora de abrir una botella de vino.
Lo peor que nos puede pasar con un sacacorchos manual, es introducir incorrectamente la espiral, de modo que destrocemos el corcho y se introduzcan fragmentos de corcho en el vino.
Para evitar estos errores o problemas con corchos rebeldes, lo mejor es delegar en el sacacorchos eléctrico y su gran precisión, ya que conseguirá descorchar rápidamente el tapón de la botella sin problemas.
Los sacacorchos eléctricos son artilugios seguros e higiénicos, y a la hora de adquirir uno, tendremos que fijarnos en que sea un modelo ergonómico y tenga una batería recargable con una buena autonomía.
También es recomendable que incluyan algún tapón de silicona adicional, un vertedor y un cortapapeles, que es un instrumento para cortar fácilmente los precintos de plástico que llevan las botellas en la parte del corcho.