Dificultad: Fácil
Tiempo medio de preparación: 20 minutos
Ingredientes:
– 4 pechugas de pollo (sin piel)
– 2 cebollas medianas
– 1 guindilla roja fresca
– 1 poco de jengibre fresco
– 4 tallos de cilantro fresco
– Aceite de cacahuete o vegetal
– Una nuez de mantequilla
– 250 gr. de pasta de curry tikka masala de Patakʼs o pasta tikka masala casera
– Sal
– Un pellizco de pimienta
– 1 lata de 400 gr. de tomate natural troceado
– 1 lata de 400 ml. de leche de coco
– 200 gr. de yogur natural (opcional)
– 1 limón
Preparación:
Empezamos preparando nuestros ingredientes. Para ello cortamos la pechuga de pollo en tiras de unos 2 cm. de grosor y reservamos.
Pelamos las cebollas y las cortamos en trozos pequeños. Reservamos.
Cortamos la guindilla en rodajitas y reservamos.
Pelamos el jengibre y lo cortamos en láminas finas. Para terminar, quitamos las hojas del cilantro y picamos los tallos lo más pequeñito posible.
En una cazuela ponemos un poco de aceite junto a la mantequilla y lo calentamos a fuego medio. Cuando haya alcanzado dicha temperatura, añadimos la cebolla junto con la guindilla, el jengibre y los tallos del cilantro, y lo dejamos freír durante unos 5 minutos, hasta que veamos que está blanda y dorada.
Seguidamente añadimos a la cazuela el pollo y la pasta tikka masala, lo removemos bien para que se impregne la carne de la pasta y lo sazonamos con sal y pimienta.
Añadimos el tomate y la leche de coco, más una medida de la misma lata de agua. Lo removemos bien y dejamos hasta que rompa a hervir.
Ahora bajamos la temperatura a fuego bajo y lo dejamos cocinar durante 20 minutos bien tapado. Transcurrido ese tiempo, comprobamos que nuestra carne esté tierna y bien guisada. Lo probamos y rectificamos la sal o la pimienta si fuera necesario.
Ya tenemos nuestro tikka masala a punto para servir. Acompañado de un poco de arroz basmati y un poco de yogur es delicioso.